EL DÍA, DESDE EL ALBA, ES UNA ESCUELA
Me ha dolido un poeta pesimista,
no le encuentra ilusión a cosa alguna,
y se encierra en su cama, sola y muda,
entre sombras y sombras que ella apila.
Es la ilusión el ave que más vuela,
el verla y admirarla es la aventura,
el día, desde el alba, es una escuela,
estar ciegos nos lleva a la locura.
Infinito el paisaje que contemplo,
aroma de las flores que me abrazan,
y todo nos sonríe en la mañana,
por la noche se queda en el recuerdo.
Bien lo sé, cuando el cuerpo no responde,
la llamada a ese cielo se termina,
si el cansancio es del alma y no vigila,
todo acaba en su sol que no es entonces.
La esperanza que espera es el secreto,
como luz que tendrá ya iluminada,
certeza que se esconde tras el velo,
rota espera que ya será abundancia.
¡Oh, el hombre, valor es de infinito!
…y el amor, que en el alma bien se expresa,
quisiera no quedarse sin él mismo,
el amar y el vivir, su pura esencia
Eulogio Díaz García
Espero comentarios
Buena poesía, me ha encantado
ResponderEliminar